¿Por qué se dice que muere el internet en Rusia?
En los últimos meses, titulares de todo el mundo han repetido una frase contundente: muere el internet en Rusia. Esta expresión no se refiere a una desconexión absoluta, sino a la combinación de apagones masivos de red, restricciones gubernamentales y un control cada vez mayor del acceso digital por parte del Kremlin.
Los datos hablan por sí solos: en junio de 2025 se registraron 655 apagones de internet móvil y en julio la cifra se disparó a más de 2 000 interrupciones, superando a cualquier otro país en el mismo período. Esta situación ha afectado directamente la vida de millones de ciudadanos.
¿Qué está causando los apagones en Rusia?
El gobierno ruso justifica los cortes señalando que son necesarios para detener ataques con drones ucranianos, que utilizan sistemas de navegación GPS e internet móvil. Sin embargo, expertos y ONG denuncian que muchos apagones se producen en zonas lejanas al frente de guerra, lo que sugiere un objetivo de control interno y censura digital.
Ejemplo: durante julio, regiones enteras quedaron incomunicadas durante horas, impidiendo pagos electrónicos, uso de apps de taxi, entregas a domicilio y hasta comunicaciones básicas.
¿Cuál es el impacto económico de estos apagones?
La frase muere el internet en Rusia también describe un fuerte golpe económico. Según estimaciones, solo en julio las pérdidas superaron los 26 mil millones de rublos (unos 290 millones de dólares).
El Banco Central de Rusia informó que la circulación de efectivo aumentó en 400 mil millones de rublos, ya que millones de personas no podían usar transferencias, aplicaciones de pago ni tarjetas. Esto supone un retroceso en la digitalización financiera y genera serios problemas en el comercio local.
¿Qué significa el “internet soberano” de Rusia?
Otro factor clave es la construcción de un “internet soberano”, un sistema que permitiría a Rusia desconectarse del internet global y funcionar de manera aislada.
Esto incluye:
- Bloqueo de VPNs y limitación de apps de mensajería como WhatsApp o Telegram.
- Desarrollo de una aplicación estatal llamada Max, que será preinstalada en smartphones y sustituirá a plataformas extranjeras.
- Capacidad técnica para redirigir todo el tráfico a servidores controlados por el gobierno.
Estas medidas refuerzan la percepción de que, más que por motivos de seguridad, el Kremlin busca controlar el flujo de información y la libertad de expresión.
¿Cómo afecta a los ciudadanos que muere el internet en Rusia?
Para la población, el impacto es directo y cotidiano:
- No pueden pagar con tarjeta en supermercados o transporte.
- Las aplicaciones de movilidad y reparto dejan de funcionar.
- La comunicación con familiares en el extranjero se vuelve inestable.
- Las empresas locales pierden competitividad frente a países con conectividad plena.
Un ejemplo concreto: en Moscú, varios días de julio vieron colas de personas sacando efectivo en cajeros por temor a quedarse sin medios de pago.
¿Se puede hablar de un apagón total?
Decir que muere el internet en Rusia no significa que el país haya quedado completamente desconectado, pero sí que sufre una “muerte digital progresiva”, como lo definen algunas ONG de derechos humanos: una estrategia de cortes constantes, bloqueos parciales y vigilancia masiva.
La AP News lo describió como “una muerte por mil cortes”, en referencia a cómo las pequeñas restricciones acumuladas están apagando poco a poco la libertad digital en Rusia.
Conclusión: ¿qué futuro le espera al internet en Rusia?
El escenario indica que el internet en Rusia no ha desaparecido por completo, pero sí atraviesa una transformación radical hacia un modelo controlado, aislado y vigilado.
Si la tendencia continúa, la frase muere el internet en Rusia podría convertirse en una realidad no solo simbólica, sino también práctica: un país desconectado del mundo digital global, con consecuencias sociales y económicas profundas.